2 Samuel 22:21-30
«Por lo cual me ha recompensado Jehová conforme a mi justicia; conforme a la limpieza de mis manos delante de su vista». (25)
Nuestra justicia (21-25)
¿Cómo ha actuado Dios? ¿Cuál es la razón por la cual nos concede su liberación? David dice que el Señor ha tratado con él y lo recompensó a causa de su justicia. David dice: «Fui recto para con él, y me he guardado de mi maldad». ¿Cómo? ¿Acaso David tenía un severo caso de pérdida de la memoria? ¡Él cometió adulterio y asesinato! La razón por la que David podía declarar esto era porque el Señor había quitado su pecado de la misma manera que él ha quitado el nuestro. Dios nos ha hecho justos en Cristo y él lidia con nosotros con base en la justicia que hemos recibido. ¡Cuán maravillosa es la gracia asombrosa de Dios!
La ayuda de Dios (26-30)
Dios nos ha hecho fieles, inocentes y puros, y estas son las formas en las que él nos responde. David dice que Dios salva a los humildes, pero humilla a los soberbios. Mientras menos pensemos de nosotros mismos, más puede obrar Dios en nuestras vidas. David también dice: «Tú eres mi lámpara, oh Jehová». David había pasado bastante tiempo escondiéndose en cuevas oscuras donde no se podía ver nada. Él sabía lo que significaba vivir en la oscuridad. La palabra de Dios ilumina nuestras vidas porque nos da la verdad, dirección y esperanza. Con la ayuda de Dios, podemos superar todos los obstáculos de la vida y servir a su reino.
Oración: Padre, gracias por nuestra justicia en Cristo.
Una palabra: Dios me ha recompensado.